Los incidentes relaciona­dos con armas de fuego su­man 650 menores de edad muertos en Estados Unidos este año, según la organiza­ción Gun Violence Archive.

78% de los menores de edad fallecidos en incidentes con armas de fuego tenía entre 12 y 17 años; en 2020 esta fue la primera causa de muerte, por arriba de los choques
De ellos, 141 tenían me­nos de 11 años, mientras que los 509 restantes, 78% del total, entre 12 y 17 años.

Las cifras incluyen todos los incidentes vinculados a armas de fuego, como ho­micidios intencionales, no intencionales y suicidios. Contabiliza a los 19 alum­nos de la primaria Robb, en Uvalde, Texas, donde el martes Salvador Ramos, un joven de 18 años, disparó contra los estudiantes.

En 2020, los incidentes con armas de fuego fueron la principal causa de muer­te entre menores de edad, superando los accidentes viales, de acuerdo con el reporte Causas actuales de las muertes entre niños y adolescentes en EU, elabo­rado por The New England Journal of Medicine.
El incremento en la mortalidad relacionada con armas de fuego (...) mues­tra que seguimos fallando en proteger a la juventud de causas de muertes preveni­bles”, detalló el documento.
Las escuelas deberían ser santuarios de seguridad para nuestros hijos, no donde van a morir”, expresó ayer la agrupa­ción Moms demand action (Ma­dres exigen acción), integrada por madres activistas por el control de armas.
stamos enojadas, estamos indignadas, tenemos el corazón roto”, agregó la organización que surgió a partir de la matanza en la escuela Sandy Hook, en la que un joven mató a 26 personas en Connecticut.
En 2020, los incidentes con ar­mas de fuego se convirtieron en la principal causa de muerte entre menores de edad, superando los accidentes automovilísticos, de acuerdo con el reporte Causas ac­tuales de las muertes entre niños y adolescentes en Estados Uni­dos, elaborado por la publicación especializada The New England Journal of Medicine.

Tan es así que entre 2019 y 2020, el incremento en inciden­tes en ese grupo de edad aumentó 29.5%, dos veces más que el au­mento entre la población general.
El incremento en la morta­lidad relacionada con armas de fuego refleja una tendencia a lar­go plazo y muestra que seguimos fallando en proteger a la juventud de causas de muertes preveni­bles”, detalló el documento publi­cado en abril pasado.
Para el internacionalista de la Universidad Iberoamericana Erick Fernández Saldaña, la Unión Americana experimenta una con­tinua sensación de inseguridad debido a, entre diversos factores, “a la venta indiscriminada de ar­mas, sin mayores restricciones ni estatales ni a nivel federal”.
Lo sucedido en Uvalde deja ver un continuum de este tipo de tiroteos, que seguirán ocurriendo mientras no existan mecanismos que restrinjan la compra-venta de armas”, afirmó el experto.
El tiroteo en la primaria Robb avivó el debate sobre el control de las armas en EU y los señalamien­tos contra los fabricantes.

El lobby proarmas más influ­yente en EU, la Asociación Na­cional del Rifle (NRA), culpó de la masacre en Uvalde a un “criminal solitario y trastornado”.

Este fin de semana se reuni­rán en Houston sus integrantes. Al respecto, la NRA afirmó en un comunicado: “Nos comprome­teremos a redoblar nuestro com­promiso para hacer que nuestras escuelas sean seguras”.

El viernes, en esa convención se presentará el expresidente es­tadunidense Donald Trump.
Estados Unidos necesita so­luciones reales y un liderazgo real en este momento, no políticos y partidismo”, dijo el expresidente en su red social, Truth Social.
Por eso mantendré mi com­promiso de larga data de hablar en Texas en la Convención de la NRA y realizar un importante dis­curso a Estados Unidos”, agregó.
Por su parte, la gobernadora de NY, Kathy Hochul, pidió una le­gislación estatal que eleve la edad para comprar ciertos tipos de ar­mas de fuego, de 18 a 21 años.
Víctima de bullying en la escuela, con problemas en su hogar e his­torial de autolesiones, el ado­lescente que mató a tiros a 19 niños en una escuela de Uval­de, Texas, tenía antecedentes similares a los de otros autores de masacres escolares.

Salvador Ramos, de 18 años, fue abatido por un agen­te de la Patrulla Fronteriza du­rante su ataque en la Escuela Primaria Robb, donde mató a 19 niños y dos docentes, con un rifle que compró legalmente un día antes de su cumpleaños.

Ramos abandonó la se­cundaria. Su prima, Mia, dijo a The Washington Post que cuando Ramos era más pe­queño se burlaban de él por un impedimento del habla, que lo hacía tartamudear y cecear.
Lo acosaban mucho, mu­cha gente lo hostigaba”, de­claró al Post Stephen García, amigo de Ramos.
Su cuenta de Instagram, que ya fue eliminada, mos­traba fotos de Salvador con el pelo largo y los ojos cerrados. También incluía imágenes de dos rifles se­miautomáti­cos.

Hubo re­portes de pe­leas entre Ramos y su ma­dre, quien con­sumía drogas, según vecinos.

Otro amigo, Santos Val­dez, recordó que Ramos una vez se cortó la cara “sólo por diversión”.

Grave, abuela de autor de tiroteo en Texas

La primera víctima de Ramos fue su abuela, a quien disparó en la cara. Ya herida, la mujer de 66 años llamó a la policía para alertar de los planes de su nieto. Fue trasladada en avión en estado crítico a un hospital en San Antonio.

El pistolero, que avisó en Facebook su intención de atacar una es­cuela primaria, huyó de la casa de su abuela en un vehículo, vistiendo un chaleco táctico y armado con un rifle.

Luego chocó cerca de una zanja afuera de la primaria Robb, salió, y se dirigió a la escuela, donde policías in­tentaron detenerlo.

Ramos se atrincheró en dos aulas contiguas y le dis­paró a los estudiantes y a los maestros presentes, dijeron las autoridades.

La tarde y noche del mar­tes y la mañana de ayer, pa­dres de estudiantes de la primaria Robb seguían bus­cando a los menores, que fue­ron trasladados a otra escuela de Uvalde y, en algunos casos, a San Antonio.

“No haces nada”, reclaman a gobernador de Texas

Respecto del ataque en Uvalde, el gobernador de Texas, Greg Abbott, desvió ayer una pregunta sobre si se necesitaban cambios en las leyes sobre armas, apun­tando a la atención de la sa­lud mental.
Necesitamos hacer un mejor trabajo con la salud mental”, dijo.
Abbott fue confronta­do por el demócrata Beto O’Rourke, quien interrumpió la conferencia de prensa so­bre el tiroteo para responsa­bilizarlo de la masacre.
¡Usted no está haciendo nada, no nos está proponien­do nada!”, dijo O’Rourke diri­giéndose a Abbott.

Esto es culpa suya”, agre­gó O’Rourke, un ferviente de­fensor del control de armas que buscó la nominación pre­sidencial en 2020.

-AFP y Reuters