Trabaja Ficosec en prevenir actos de violencia que afecten el desarrollo de los niños.

Con el propósito de fortalecer y mejorar la participación de las organizaciones de la sociedad civil que tienen que ver con la salud mental de niñas, niños y adolescentes, el Fideicomiso para la Competitividad y Seguridad Ciudadana (Ficosec), trabaja con estas asociaciones en proyectos para la prevención de la violencia.

Se está trabajando en la aplicación de varios programas y uno de ellos es para fortalecer a las organizaciones en terapia cognitiva conductual y atención plena a los menores, dijo la coordinadora de la Unidad de la Prevención de la Violencia de Ficosec, Mely Carreón.

“Tenemos una inversión activa de 33 millones de pesos en estos temas, de los cuales son alrededor de 9 millones de pesos vinculados a la salud mental, cantidad que se invierte a través de varios programas”, expresó.

Carreón dijo que hay poco acceso a programas de salud mental en las escuelas que atiendan los factores psico-socio-emocionales, pero además el fácil acceso a las armas es una problemática grave; en México hay 15 millones de armas y solamente el 20 por ciento cuentan con un permiso o están institucionalizadas.

“Por otra parte”, dijo, “a nivel sociedad tendemos a no responsabilizarnos, todos tenemos una responsabilidad en casos como el del niño de Torreón que mató a su maestra y luego se suicidó, tanto el Gobierno que no provee programas al interior de las escuelas, como nosotros como padres que no estamos atentos a las necesidades que tienen nuestros hijos”.

Detectan desintegración familiar
“Aunado a ello —señaló— “están las condiciones laborales, que no ayudan a que los padres tengan más tiempo para poder estar atentos a las necesidades de sus hijos; ya llegan cansados están todo el tiempo en redes sociales, a los niños a su vez les damos el teléfono celular para entretenerse, entonces no podemos decir que es sólo un tema de alguna problemática familiar o que es el tema de las escuelas”.

Sobre el tema la psicóloga de Casa Amiga, Paola Barraza Gómez, dijo que se ha detectado mucha desintegración familiar, pues desafortunadamente los padres no están presentes en la vidas de sus hijos, por lo tanto no saben qué es lo que les falta, si les falta amor, compresión y como están de su autoestima.

“Los padres no están atentos a saber con quién pasan el tiempo sus hijos, a pesar de que es de vital importancia estar presentes y dedicarles el espacio y la atención que necesitan”, expresó.

“Esto da origen a la influencia en la normalización de cuestiones que pasan en la comunidad, pues nos han tocado casos de niños que nos dicen que quieren ser sicarios, porque eso es bueno en la parte económica”, comentó.

Al comentar sobre el niño que disparó a su maestra, la psicóloga dijo: “Más que verlo como agresor, es una víctima de toda esta situación, no sabemos bajo qué factores vivía; ésta es una pauta para modificar toda esta estructura mal aconsejada en nuestra sociedad, es un tema lamentable, nosotros como padres necesitamos ejercer más esa responsabilidad de estar con nuestros hijos”.
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Fuente: diario.mx/juarez