Esta es una semana de definiciones para el ajedrez político rumbo a las elecciones del año próximo. Delfina Gómez Álvarez, la secretaria de Educación Pública que triunfó en las tres encuestas de Morena como precandidata al gobierno del Estado de México

debe hacer la entrega-recepción de su cargo, como lo marcó el presidente Andrés Manuel López Obrador en su conferencia "mañanera" del pasado viernes. No obstante, el nuevo nombramiento en la dependencia se mantiene en suspenso y el tiempo para el inicio del nuevo ciclo escolar –el 29 de agosto– ha empezado a correr en contra.

Mientras, especialistas no ven terso el futuro para Delfina Gómez. La eventual candidata morenista se enfrentará a la maquinaria del PRI que ha gobernado la entidad mexiquense durante 93 años sin interrupción, además tendrá que darle la cara a un pasaje turbio del pasado: el cobro del 10% del sueldo a los funcionarios de su gobierno cuando fue presidenta municipal de Texcoco para Morena, lo que ameritó una multa del Tribunal Electoral de más de 4 millones de pesos.

Pero además, Gómez Álvarez debe asumir como coordinadora de Morena en la entidad mexiquense en momentos en que el partido vive una pugna interna histórica. La dirigencia nacional, a cargo de Mario Delgado, ha aplazado la revelación de los resultados de la elección de consejeras y consejeros, mientras que morenistas opositores piden que el proceso sea anulado. Con todo, el movimiento a través de Delfina Gómez debe hacerse cuanto antes.