Autoridades chilenas impusieron un toque de queda la noche del sábado en Santiago, informó un general del Ejército a cargo de la seguridad de la ciudad, en medio de un estado de emergencia para hacer frente a dos días de protestas violentas.

Los disturbios llevaron a las autoridades a decretar la noche del viernes el Estado de Emergencia en la Región Metropolitana, para después endurecer la medida con un toque de queda que regirá desde las 22:00 horas del sábado a las 07:00 horas del domingo.

Sin embargo, la medida que impedirá el tránsito de personas en la calle en el periodo de tiempo establecido ha sido rechazada por la oposición. El presidente de la Democracia Cristiana (DC), Fuad Chahín, calificó el toque de queda como ‘un tremendo error’ del gobierno.

Las manifestaciones, en protesta contra el aumento de la tarifa del boleto de Metro, se tornaron violentas y se registraron graves desórdenes con incendios en varios puntos de Santiago, saqueos y actos vandálicos que sumieron a la capital del país en el caos.

Los daños registrados en el Metro durante los disturbios ascienden a 200 millones de dólares, indicó este sábado el gerente general de ese servicio de transporte, Rubén Alvarado.